Internet ha cambiado el mundo. Ahora nuestra vida diaria está vinculada a espacio virtual, voy al cine con entradas compradas a través de la venta online, comento la peli en Twitter y con mi móvil accedo a la página web de la productora que ha realizado la película y participo en el sorteo de un viaje a California donde se rodó. Podemos averiguar la vida de “los otros” visitando sus redes sociales. Nuestra vida laboral y personal está superconectada a Internet. Las nuevas generaciones no utilizan los medios convencionales para vivir, la vida se duplica, la real y la virtual conviven, la frontera entre las dos se difumina. Si la real no me gusta me fabrico una virtual, ¿por qué? porque puedo, existen diferentes posibilidades de hacerlo, una de ellas son las redes sociales…